
Esta mañana hemos tenido que presenciar el énesimo episodio de en lo que se está convirtiendo un equipo que en su día fue santo y seña del futbol mundial. Ha sido un periodo estival cargado de desesperanza. De jugadores que se quieren ir y de jugadores que no quieren venir. Para alguien como yo que he vivido muchos años la sensación de que todo el mundo mataría por vestir esta camiseta y defender este escudo, es una dura bofetada de realidad. Me quedo, no obstante, de este periodo, con la imagen del roble Diarrá y de Arjen Robben, tirados en el suelo, extenuados, por defender, con todo su sudor un escudo y ganar un nuevo trofeo para el madridismo, que les paga y sobre todo les adora y a veces endiosa.
Sobre lo de Robinho, mucho se ha dicho y ha habido mucha discrepancia. Mi opinión particular es que los culpables de la situación se alejan bastante del terreno de juego y visten, como yo, traje y corbata. Unos, los mandamases blancos, con su soberbia y prepotencia no saben guiar este barco de indescriptible historia y llevan todo el verano con el enésimo sueño inconcluso del méndigo presidente sin valorar otra cosa. Otros, los representantes, que pretenden aprovecharse del eco que suele abundar en las cabezas de los futbolistas para lucrarse.
Y por ultimo, también hay que censurar a Robson. Un chavalito que vino con la vitola del nuevo Pelé y salvo por el furor sexual en nada se ha asemejado, no puede, por mucho que se sienta de segunda categoria en relación al mimado Cristiano, montar unos espectaculos mediaticos a escasas horas del inicio de la temporada del equipo que le paga (bien) y con el que tiene un contrato firmado en vigor.
Como diría mi buen Santiago Bernabeu (y se lo dijo sin ir mas lejos a la Saeta Rubia, que sí demostró algo en el Madrid): Chaval si no quieres estar en este equipo tienes 53 puertas de salida. Y yo añado con mi perfil de picapleitos que si quieres rescindir el contrato, paga como todo hijo de vecino que no cumple con su palabra rubricada y vete al Chelsea para ser el mejor jugador del mundo.
Ah!. Y que alguien le ponga de camino a Londres unos videos de Messi, Agüero, Ronaldo y al menos diez jugadores más que a día de hoy le sacan una gran ventaja en esa noble aspiración. Adios a Robinho, Adios a un nuevo juguete roto!.